La FAI y los cincopuntistas

Entrevista a cincopuntistas, Índice, Barcelona, enero de 1965 (Archivo La Alcarria Obrera)

En el año 1965, forzado el régimen franquista a renunciar a su dogmático ideario fascista, no tuvo el general Franco y sus secuaces otra opción que apartar a los sectores más falangistas, que fueron progresivamente sustituidos por los tecnócratas vinculados al Opus Dei. Los falangistas, arrinconados en el sindicato vertical, quisieron utilizar a la CNT para reverdecer su revolución nacional-sindicalista y atraerse a una clase obrera que cada vez les repudiaba con más claridad. Apenas un puñado de viejos cenetistas apoyaron ese pacto entre la CNT y la CNS, resumido en cinco puntos y de de ahí el nombre de cincopuntistas; contra ellos se manifestó la práctica totalidad de los anarquistas del interior y del exilio. Ofrecemos el documento elaborado por la Federación Anarquista Ibérica.

Cincopuntismo


Por cincopuntismo se conoce los pactos establecidos en los años 1960 entre el Sindicato vertical del Franquismo y un sector procedente de la CNT.
Recibe su nombre de un pacto en que se formulaban cinco puntos de acuerdo y que fue firmado entre junio y julio de 1965 por miembros de la CNT del interior (a título individual) y representantes de la Confederación Nacional de Sindicatos, un organismo oficial franquista. En noviembre de ese mismo año la prensa franquista difundía el contenido de estos acuerdos. Mientras tanto, la firma de estos acuerdos fue objeto de un rechazo mayoritario por parte de la mayoría de las regionales de la CNT del interior.
Con esta operación el franquismo perseguía vaciar de contenido a la CNT y aprovechar el prestigio histórico de ésta entre los trabajadores para legitimar las organizaciones del Sindicato Vertical.
Entre los cincopuntistas se puede enumerar a Lorenzo ÍñigoFrancisco RoyanoSaturnino CarotSebastián Calvo y posteriormente Enrique Marco Nadal.
Ante el rechazo mayoritario entre los cenetistas (y de forma especial en el exilio) fueron detenidos los miembros del Comité Nacional de la CNT, cuyo Secretario era entonces Fidel Gorrón. Por primera vez eran juzgados en la jurisdicción ordinaria y no -como era habitual hasta el momento en el franquismo- por la militar (como delito de rebelión).